El extraño caso de una mujer que producía alcohol a través de sus intestinos
Visitó médicos por varios años y no consiguió que ninguno le diera respuesta, incluso creían que mentía.
Existe un síndrome del que poco se habla, se trata del de fermentación intestinal, lo cual es una afección extremadamente rara en la que las bacterias y los hongos del tracto gastrointestinal convierten en alcohol los carbohidratos de los alimentos cotidianos.
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Y es que es una enfermedad tan poco conocida que incluso resulta extraño, pues los investigadores siguen sin conocer el origen exacto de este síndrome. Sin embargo, al parecer sucede cuando hay un crecimiento excesivo de ciertas cepas de levadura en especial en el intestino delgado.
Justamente el desconocimiento de la enfermedad hace que su diagnóstico de este síndrome puede ser un proceso complejo y extenso, ya que a menudo implica descartar otras posibles causas de los síntomas. Los profesionales de la salud pueden usar métodos diferentes para determinar la presencia y gravedad del trastorno.
Pues justamente este fue el caso de esta mujer de Estados Unidos cuya historia llegó a CNN, su aliento apestaba a alcohol, todo el tiempo estaba mareada, desorientada y débil, incluso llegó a perder la conciencia, se desmayó y se golpeó la cabeza contra la encimera de la cocina mientras preparaba la comida para sus hijos pequeños.
A pesar de que ella no consumía ni una sola gota de alcohol y aunque visitaron varios médicos, la mujer de 50 años de Toronto y su marido contaron que dejaron de creerles: "Visitó a su médico de cabecera una y otra vez y acudió a urgencias siete veces a lo largo de dos años", explica la doctora Rahel Zewude, especialista en Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Toronto.
Incluso muchos médicos llegaron a cuestionarle si decía la verdad y cuestionaron los hábitos de consumo de alcohol de la mujer y tuvo que ser vistas por tres psiquiatras distintos del hospital, quienes concluyeron que no cumplía los criterios para el diagnóstico de un trastorno por consumo de alcohol.
"Pero no fue hasta la séptima visita cuando un médico de urgencias dijo por fin: 'Creo que esto suena a síndrome de la fermentación intestinal', y la refirió a un especialista", explicó Zewude.