Poderoso ritual para librarte de las obsesiones

Cuando una idea, una persona, un proyecto o una cosa no salen de tu cabeza y comienzan a controlar lo que haces diariamente y tus emociones, es cuando comienza a aparecer el término “obsesión”; se trata de aquello que te gusta, te interesa, te atrae o deseas realizar con tantas fuerzas que empieza a interferir en el resto de tu vida por el poder que tiene en ti.

De hecho, son muchas las personas que sufren porque es esto, precisamente, lo que les permite avanzar en su camino como les gustaría, y aunque quieren finalmente librarse, no es tan fácil como lo imaginan, pues ya se ha apoderado de sus pensamientos. Es por esta razón que hoy haremos uso de los rituales para superar de una vez por todas cualquier obsesión que tengas, enseñándote uno en especial, compartido por la médium Luz Silva Solar en ‘Hechizo.net’.

¿Qué necesitas?

• Lapicero negro
• 1 hoja de papel
• Sal (marina o tradicional)
• Zumo de medio limón
• Vinagre blanco
• Incienso de lavanda
• 1 bolsa de plástico

Paso a paso

• Lo primero que debes hacer es purificar las energías del espacio en el cual se va a realizar el ritual, para ello, encenderás el incienso de lavanda y lo pasarás por todos los rincones de la habitación; mientras haces esto, agradece al universo por todo lo que te va a permitir conseguir a través de este ritual.
• Con la sal, puede ser marina o la tradicional que se usa normalmente en la cocina, vas a realizar un círculo; esto puedes hacerlo sobre una mesa o en el suelo, y debes asegurarte de que el incienso esté por fuera de la figura.

• Ahora, tomarás el lapicero de tinta negra y escribirás en la hoja de papel esta frase: “Yo (pon tu nombre completo), deposito mi obsesión en el centro de este círculo de poder, ya aprendí de mis errores, y deseo que se pudra aquello que ya sucedió, desde hoy mismo solicito continuar mi vida, no caer en los errores del pasado, olvidar las obsesiones del ayer y que se haga tu voluntad hoy y siempre. Que así sea. Amen. (Firma)”. Debes decirla también en voz alta.
• Acto seguido, dentro de la circunferencia que has realizado con la sal, dobla la hoja en cuatro partes y deja que sobre ella caiga el zumo de medio limón, ahora espera que se seque un poco y agrega unas cuantas gotas de vinagre.
• Recoge las cenizas del incienso, la sal con la que has hecho el círculo, deposítalas junto con la hoja de papel doblada cuatro veces en una bolsa de plástico y agítalas un poco. Pasados algunos minutos, saca de la bolsa la hoja sin usar tus manos, pues tu piel no puede entrar en contacto con el papel ni con las cenizas y procede a enterrarla en un lugar donde haya mucha naturaleza. 
• Ahora, estarás listo para continuar con tu vida, pues has enterrado para siempre el dolor y los apegos que se estaban convirtiendo en tu peor obstáculo.