Oración a Dios para pedir por el bienestar de los nietos
Acude a esta oración en momentos de dificultad para fortalecer tu relación con Dios y que interceda en la vida de tus nietos.
Los abuelos son seres llenos de sabiduría, amor, compresión y ternura. Son quienes nos guían por el buen camino, incluso cuando dejan el mundo terrenal. Ellos siempre velan por nuestro bienestar y abogan por nosotros cuando nos equivocamos.
Cuando los nietos atraviesan momentos de dificultad, los abuelos pueden acudir a la oración para implorar al cielo la resolución de sus conflictos, pues suelen tener una conexión espiritual con Dios muy poderosa. A continuación te compartimos una oración muy efectiva de la web Catholic.net para pedir por el bienestar de tus nietos.
Practicar este rezo de forma constante con mucha fe, devoción y esperanza te permitirá acercarte a Dios y entregarle tus peticiones sobre la protección de tus nietos. Recuerda que el todopoderoso siempre escucha las oraciones y las responde con amor y milagros.
Oración por el bienestar y la protección de los nietos
Dame, Señor, la cordura para poder hablar a mis nietos del amor que mi ser contiene.
Dame, la oportunidad de besar su frente por las noches y en cada amanecer.
Quiero pedirte que des luz a mis ojos para disfrutar con ellos de sus sonrisas, de sus cambios de voz.
Quiero que cuando ellos miren mi lento andar comprendan que la vida está hecha de pasos y de caídas, que todo es aprender y llegar a amar.
Es mi ilusión que al verme ellos de la mano de su abuelo/a, sepan que el amor nunca termina.
Deseo que cuando me escuchen orar, con el pasar de los años entiendan que siempre deben recurrir a Tí, pues eres el camino, la verdad y la vida.
Señor, te pido que les des valentía para soñar y ánimo para perseguir sus sueños, que nunca abandonen al niño que Tú le has colocado dentro.
Te pido que tengan la capacidad de ver hacia adelante, de caminar sin atropellar a nadie, de abrir nuevas metas y nunca sentirse derrotados, de ser humildes ante toda tu creación, respetuosos de lo que los rodee, amantes de los gestos del hermano, compasivo ante el dolor, generosos y magnánimos ante el caído.
Amén