¿Es mejor hacer ejercicio por la mañana o por la noche?

La duda que aqueja a la mayoría de personas que desean iniciar con una vida saludable e implementar el ejercicio en su rutina diaria siempre es si es mejor realizarlo en la mañana o la noche debido a su efectividad, pero investigadores de la Universidad de Copenhague, de Dinamarca, decidieron poner fin a esta inquietud.

Los investigadores de esta universidad que es una de las más antiguas y grandes, decidieron tomar ratones para llevar a cabo el estudio, por lo cual prestaron atención al comportamiento de estos animales y los resultados que traía para ellos el realizar actividad física en horas de la mañana o de la noche.

¿Cómo se desarrolló el estudio?

Para los ratones el “comienzo de la noche” es distinto al de los humanos, siendo este momento su hora más activa, contrario a la mañana que es cuando descansan, y a partir de esto, se dio espacio para mirar en su hora de la noche y de la mañana qué resultados cariacos podía revelar.

Se identificó que, efectivamente, el realizar actividades a ambas horas arroja distintos resultados y beneficios para el cuerpo, por lo cual se mostró que el ejercicio en horas de la mañana ayuda a las células musculares , además de la respuesta transcripcional y trae efectos positivos en el metabolismo, lo cual es mejor para las personas que sufren de sobrepeso o diabetes tipo 2, mientras que el ejercicio en horas de la noche aumenta el gasto de energía del cuerpo momentos después de culminar con la actividad física.

En conclusión, hacer ejercicio en la mañana o en la noche es bueno y cada uno tiene sus beneficios, lo que hay que hacer es identificar cuál es tu objetivo a la hora de iniciar con una rutina para así determinar si lo correcto es llevarla a cabo en horas de la mañana o de la noche.

Finalmente, Jonas The Treebak, participante de la investigación concluyó que “sobre esta base no podemos decir con certeza cuál es el mejor ejercicio, si por la mañana o por la tarde. En este punto, solo podemos concluir que los efectos de los dos parecen diferir y ciertamente tenemos que trabajar más para determinar los mecanismos potenciales para los efectos beneficiosos del entrenamiento con ejercicios realizados en estos dos puntos temporales.”