La vacuna más rápida desarrollada en el mundo tardó cuatro años y fue la de las paperas

El mundo sigue en carrera contra el reloj para la obtención de una vacuna segura contra el coronavirus, son muchos los estudios promocionados y a pesar de que existan promesas de pronta aparición, el virus que marcó el 2020 sigue manifestándose en todo el mundo con millones de contagiados.

Las voces científicas que hacen eco de la experiencia histórica en el desarrollo de las vacunas aseguran que la obtención de una de estas supone un proceso que puede tardar años, por tal razón, no se muestran muy confiados en que en menos de un año se pueda contar con una que ponga fin a esta pandemia.

Hasta el día de hoy, la vacuna para una enfermedad humana que más rápido se obtuvo es la de las paperas y su proceso tardó 4 años para luego ser lanzada al mercado, aunque fue desarrollada en la década de los años sesenta, millones de personas esperan que el avance de la ciencia en estos últimos 50 años pueda permitir que el mundo cuente con una vacuna contra el Covid-19 muy pronto.

Los científicos no quieren aguar la fiesta de la producción de las vacunas, pero la experiencia dicta que no se trata de una tarea sencilla, y sobre todo, rápida, menos con un virus del que en los últimos meses apenas logró conocerse algo de su comportamiento.

El hombre al frente de la producción de la vacuna contra las paperas fue el estadounidense Maurice Hilleman, quien además estuvo dirigiendo los trabajos en más de 40 y en todas, los procesos no fueron rápidos, pero consolidaron las vacunas obtenidas como seguras para su aplicación.

Se espera que con la vacuna contra el Covid-19 la situación sea muy diferente, en enero de 2020 los chinos dieron a conocer la secuencia del genoma del Covid-19 y a partir de esa fecha, diferentes proyectos multinacionales encendieron motores y casi 11 meses después, el mundo cuenta con 44 vacunas en proceso de ensayo en humanos.

La Organización Mundial de la Salud estima que una vacuna segura pueda desarrollarse en uno o en un año y medio, y a partir de allí, realizar su distribución al mundo, otro proceso que toma tiempo, un asunto de complicada logística.

Aunque los medios publiciten una etapa 3 en la carrera por las vacunas como el momento final, existe una etapa 4 que le confiere seguridad y esta tarda años, por eso las vacunas que se encuentren en fase 3 no necesariamente indican que están a un paso de su total confiabilidad.

El mundo espera que la tradición sea vencida por los avances científicos y la humanidad pueda salir de esta situación de pandemia y crisis que ha definido la historia en el 2020.