Familia creyó haber cremado a su gato hasta que apareció en la puerta de la casa

Parece un hecho paranormal de una extraña resurrección, pero se trata simplemente de una confusión por parte de una familia que perdió a su gato y creyó haberlo cremado al encontrar “su cuerpo”, sin embargo, días después se llevaron una gran sorpresa al escuchar sus maullidos a las afueras de la casa.

Se trata de Frankie, un gato de 16 años que desapareció de casa el pasado 19 de mayo; cuando su dueña, Rachel Fitzsimons, no lo vio durante todo el día comenzó a preocuparse, pues ya había descartado la idea de que se encontrara escondido en algún lugar de la casa, y decidió emprender la búsqueda por todo el vecindario.

Tras dos días de haberse extraviado, esta mujer y su esposo notaron la presencia del cadáver de un gato en la esquina de una autopista, con marcas similares a las de Frankie en el pelaje, por lo que asumieron que era su mascota; y es que no había manera de reconocerlo bien, pues el animal estaba en perfecto estado, pero sin cabeza.

El 24 de mayo, trabajadores de la empresa que administra la autopista entregaron el cuerpo del animal en una bolsa a la familia, asumiendo que se trataba de su mascota, y les recomendaron que no la abriera, probablemente por lo traumático que podría llegar a ser, por olores o posibles enfermedades que pudiera transmitir.

Por sugerencia de un veterinario, esta familia decidió cremar a la que sería su “mascota”, y a los pocos días recibió las cenizas en una urna, la cual fue ubicada junto a la cama de Remy, el niño de 7 años, hijo de esta pareja, que dormía siempre con Frankie; y aunque sufrieron y lloraron la muerte de su querido peludo de cuatro patas, la vida les dio una maravillosa sorpresa.

Pasaron 22 días desde la supuesta muerte de Frankie, cuando escucharon que un gato había llegado a la puerta de su casa; “mi marido escuchó un maullido afuera y luego yo lo oí gritar. Salimos corriendo y allí estaba Frankie. Remy lloraba y preguntaba: ¿es real? Fue un momento increíble”, comentó Fitzsimons en entrevista con el diario Manchester Evening News.

Frankie había regresado a casa, demostrando que las cenizas a las cuales les habían llorado tanto no correspondían a su cuerpo; decidieron alimentarlo y limpiarlo, pues estaba mucho más delgado y desarreglado, y al llevarlo a revisión con el veterinario pudieron comprobar que se encontraba en buen estado de salud.

La familia cuenta al mismo medio que no se deshicieron de las cenizas del otro animal, y cuenta que Frankie se pasa por el lugar frecuentemente; y aunque lamentan el estado en el que se encontraba el otro minino, se alegran de que no haya sido su mascota y que puedan seguir disfrutando de su presencia.