Liga BetPlay: Cali y Nacional siguen el novelón. Presidente azucarero exige paz y salvo, pues ya pagó deuda

La novela de todo este tiempo, en el fútbol profesional colombiano, ha estado protagonizada, ya no por un famoso jugador y un club, sino por dos importantes clubes que, tras una transacción echa hace años, terminaron en inconvenientes luego de que uno de los dos quedara debiendo un dinero.

Es el caso de Atlético Nacional y Deportivo Cali, y la deuda que viene desde el ya lejano 2013 y cuya razón es el traspaso de Luis Fernando Mosquera, del verde antioqueño al verde vallecaucano y cuyo pago jamás completó el equipo caleño. Razón por la cual, le adeudaba al cuadro paisa, una suma cercana a los 400 mil dólares que, con intereses, se convirtieron en poco más de 600 mil.

El lío se agrandó cuando, hace unos meses, tanto la Dimayor como la Federación Colombiana de Fútbol exhortaron al club a pagar, sancionándolo con la prohibición de inscribir jugadores nuevos, lo cual podría impactar directamente en el equipo, que aún se encuentra peleando por evitar el descenso.

Para manejar el asunto, desde ambos lados se hicieron ofertas, aunque ninguna satisfizo a ninguno de los interesados, por lo que al final se acordó el pago del dinero, sin acudir a transferencias de jugadores u otro tipo de estrategias. Sin embargo, esta mañana el presidente del cuadro azucarero, Humberto Arias, volvió a darle vida a la pelea, asegurando que ya pagó este dinero, por lo que le exige a Sebastián Botero, presidente de Nacional, la entrega del paz y salvo.

Sin embargo, según publicó en su cuenta de X el periodista Juan David Londoño, el pago se hizo con la TRM de 2013, mientras que el presidente del bicampeón de América, esperaba el pago según la TRM actual, razón por la que se resiste a entregar el documento de pago, pues en su manera de ver, el equipo caleño aún le debe dinero al paisa.

Esto seguramente alargará unas cuantas semanas el novelón, mientras que el Cali sigue sin poder inscribir jugadores, debido a la sanción recibida y tras no conseguir el paz y salvo. De esta forma, habrá que esperar un poco más, para conocer el final de esta larga y ya cada vez complicada novela.