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Por: Juan Carlos Garcia Sierra • Colombia.com

Asiste a la ceremonia de juramento y no te quedes sin tu ciudadanía estadounidense

Convertirse en ciudadano de EE.UU. no es una tarea fácil. Foto: Pixabay

Asistir a la ceremonia de juramento es indispensable porque quienes no lo hagan o lleguen tarde al evento no recibirán la ciudadanía de los Estados Unidos.

El proceso de naturalización o convertirse en ciudadano de los Estados Unidos no es fácil y toma tiempo porque solo puede iniciarse después de 5 años residiendo con una Green Card, aunque existen casos de muchos migrantes a los que les ha tomado más tiempo porque realizaron varios intentos y no lograron aprobar los exámenes.

El conocimiento del idioma inglés ha sido el principal obstáculo para los migrantes que quieren convertirse en ciudadanos de los Estados Unidos y así poder disfrutar de los beneficios que esto significa, entre otras cosas, la oportunidad de contar con el pasaporte azul de los Estados Unidos.

Quienes han aprobado el examen para convertirse en ciudadano estadounidense recomiendan prepararse muy bien en inglés y hacerlo en todo lo concerniente a la realidad, cultura, historia y política de los Estados Unidos, así como también en sus leyes, aunque de manera básica, pues no se ahonda en este aspecto.

Quienes presentan el examen para aspirar a la ciudadanía de los Estados Unidos son migrantes residentes legales que han cumplido con todos los requisitos para ser aspirantes a la naturalización, entre los cuales están el haber respetado todas las leyes y no contar con deudas pendientes con la justicia.

Aprobar los exámenes en inglés de la naturalización no garantiza que se le otorgue la naturalización a quien los aprueba porque existe un pequeño detalle que ha dejado a muchos sin la ciudadanía.

Después de la aprobación de los exámenes en inglés queda un último paso y este consiste en que se le informará al migrante el día, la hora y el lugar en el que debe presentarse para prestar juramento y recibir la nacionalidad, una ceremonia que no solo es obligatoria, sino que compone el último requisito para la naturalización.

No asistir a la ceremonia de juramento o llegar tarde es causal para que no se conceda la ciudadanía de los Estados Unidos, y aunque resulte difícil de creer, son muchos los que han perdido la oportunidad de ser estadounidenses por este detalle.

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