Señales de que tienes el ‘síndrome del domingo’ y deberías buscar un trabajo que te de más tranquilidad
El trabajo puede afectar la vida diaria e incluso la salud mental y el bienestar, de eso se trata el sindrome del domingo.
Aunque parezca increíble, el trabajo es una de las cosas que más afecta la vida diaria de las personas, así como puede generar satisfacción, también puede generar malestar, para muchas personas, el domingo al atardecer se ha convertido para muchos en un momento de inquietud y desasosiego.
Hay quienes experimentan sentimientos de tristeza porque el fin de semana se terminó, pero en otros aumenta la preocupación y el nerviosismo por la gran cantidad de tareas laborales a realizar y los problemas a enfrentar.
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Esto se ha convertido en un problema, al parecer porque la ansiedad del domingo por la noche y el malestar del lunes por la mañana es un problema que se ha agudizado, según un estudio dirigido por Ilke Inceoglu, profesora de Comportamiento Organizacional y Gestión de Recursos Humanos de la Universidad de Exeter, Reino Unido.
Al parecer son los empleados los que más experimentan los llamados “sunday scaries” o “miedos del domingo” y es porque están cargados mentalmente de las preocupaciones que vienen durante el resto de la semana.
Esta preocupación por la semana desencadena sentimientos de miedo, nervios e incluso dificultades para dormir, por lo que esto hace que la semana comience aún peor. Este síndrome del domingo fue detectado por primera vez en 2006 por la psicóloga norteamericana Larisa Kase, quien realizó una serie de investigaciones y encontró que este sentimiento de tristeza ocurre mayormente por insatisfacción laboral.
Se recomienda pensar en una estrategia 360°, pensando acciones desde tres planos: El significado del trabajo, observar qué es lo que nos hace sentir así respecto a nuestros roles, tareas, cultura organizacional y jefes, también es importante ver si el trabajo está conectado con nuestro propósito o si está en línea con algún mandato o trauma o situación no resuelta que necesite ser tratada por fuera de nuestro rol actual.
Para controlar este síndrome es importante trabajar en la respiración, técnicas de meditación, la pausa para escucharnos, hacer pequeñas acciones que permitan restablecer nuestra energía o definitivamente buscar un trabajo que te haga feliz, aunque eso no siempre es posible.